Visto que el desempleo sigue creciendo, grupos sindicales y por el medio ambiente ven con buenos ojos los esfuerzos del presidente electo Barack Obama para que se apruebe $775 mil millones para un programa económico con “trabajos verde” hasta antes que él tome poder.

Charlie Witt, oficial del Local 512 de los Trabajadores de Hierro, basado en el área de Minneapolis-St. Paul en Minnesota, dijo que existen muchos puentes oxidados que necesitan ser reparados como el que cruza el Río Mississippi de la ruta I-35 que se derrumbó el 1 de agosto 2007, causando la muerte de 13 personas y heriendo a 145.

“Tuvimos 140 obreros afiliados a mi sindicato local trabajando en un puente para reemplazarlos”, dijo Witt. “Empezamos en septiembre del 2007 y lo terminamos en septiembre 2008”.

Otro puente que cruza el Mississippi como a 20 millas de St. Paul necesitada reparaciones, agregó. “Es doble lo largo y en peor condiciones que el puente de I-35. Temo que el derrumbe del puente I-35 es solo un precursor de lo que viene. Los puentes se están derrumbando debido a su edad o falta de mantenimiento”.

Hasta el pasado octubre, el sindicato local de Witt, que cubre a los herreros en todo el estado de Minnesota y Dakota del Norte, más un tercio de Wisconsin, gozaban de empleo total. “Ahora, yo tengo 200 obreros sentados haciendo nada y otros dos o tres son despedido por falta de trabajo cada día”, dijo él. El sector de construcción comercial e industrial “está muerto”.

“Existen proyectos listo para arrancar aquí pero los fondos locales y del estado para financiarlos simplemente no está”, dijo Witt. “El estado de Minnesota fue de tener una plusvalía modesta en el presupuesto a un déficit de $5 mil millones el pasado año”. La asistencia federal prometida por Obama “ayudaría bastante”, añadió.

Vance Ayres, secretario ejecutivo del Concilio de Oficios de Construcción del Distrito de Columbia de la AFL-CIO, también apoya la iniciativa.

“Lo más pronto que el Congreso apruebe este plan mejor será”, él dijo. “Esto va a estimular la economía y poner gente de nuevo a trabajar. Se han necesitado estas reparaciones a la infraestructura por años y por fin se van hacer. Los sindicatos en total apoyan este plan. Es una situación en que todos ganan”.

Los sindicalistas que jugaron un papel tan enorme en la elección de Obama están invitados a desfilar en la toma de poder el 20 de enero, Ayres le dijo a Nuestro Mundo. Él dijo que los sindicalistas estarán concentrados en Washington ese día para manifestar su apoyo al plan de creación de empleo de Obama, su compromiso de firmar la Ley de Libre Opción para Empleados y su promesa de reformar el sistema de salud.

Se esperan que lleguen cuatro millones de gente en Washington en 10 mil autobuses y por automóviles, aviones y trenes.

Keith Schneider, director de comunicaciones de la Alianza Apolo, una coalición organizada por el sindicato de obreros siderúrgicos y el grupo ambientalista Club Sierra, alabó el plan de Obama de introducir $100 mil millones para cambiar el énfasis de combustible fósil a fuentes de energía como viento y energía solar.

“Cien mil millón o más para acelerar el desarrollo de una economía de energía limpia es extraordinario”, le dijo a Nuestro Mundo en una entrevista telefónica desde Michigan. Él lo llamó una “idea transcendente”, agregando, “Para nosotros y el país es excitante que el presidente está basando su plan de estímulo económico en los principios básicos de una economía verde”.

Obama se reunió con dirigentes de la Cámara de Representantes y el Senado el 5 de enero en busca de ganar apoyo bipartidista par su plan para que pase el Congreso y esté listo para firmar el 20 de enero, inmediatamente después de juramentarse. Sin embargo, los líderes del Congreso dijeron que tomaría hasta febrero para aprobar la legislación. La nueva Cámara y Senado empezaron a trabajar el 6 de enero y la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, prometió trabajar rápido para un programa de estímulo económico.

Líderes republicanos que han bloqueado supervisión por el Congreso y promulgado la desregulación de los bancos y corporaciones durante los últimos 40 año ahora dicen que necesitan “examinar” el plan de Obama en nombre de buscar cosas que desperdician fondos, fraude y corrupción.

Obama ya ha sido forzado de incluir $300 mil millones en recortes a impuestos para atraer suficiente apoyo republicano aunque los recortes de impuestos crean menos empleo que el financiamiento directo de proyectos de construcción.

La Conferencia de Alcaldes de EEUU publicó un informe el mes pasado titulado “Main Street Economic Recovery” tiene una lista de 11.391 proyectos de obras públicas y servicio público listos para empezar en 427 municipios.

El alcalde de Miami, Florida, Manny Díaz, presidente de la Conferencia de Alcaldes, notó que para la gente común la “crisis económica sigue empeorando. Desde el empezar de la recesión hace un año, la nación ha perdido 2,7 millones de empleo. Como 10,3 millones de trabajadores norteamericanos ahora están cesante y el nivel de desempleo en noviembre subió a 6,7 por ciento”.

Él agregó, “Washington rescató a los bancos y compañías de seguro en Wall Street con $700 mil millones. Ahora es tiempo para que Washington haga otro tipo de inversión, uno que viene con una garantía de tener beneficios. Es tiempo para iniciar un rescate económico para el pueblo – asistencia inmediata y directa en permita que las alcaldías y el sector privado pueda invertir en la infraestructura y crear empleo que ayudará restaurar el crecimiento económico de la nación”.