El profesor Gustavo Moncayo y Marleny Orjuela, principales voceros de los familiares de policías y militares en poder de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) arreciaron en sus exigencias al presidente Álvaro Uribe Vélez para que se acelere la liberación del cabo Pablo Emilio Moncayo y la entrega del cadáver del mayor Julián Guevara y se avance hacia un acuerdo humanitario que ponga fin a esta situación.

El profesor Moncayo interpuso una acción de tutela contra el presidente de la república. El mecanismo de protección constitucional a los derechos ciudadanos radicado ante en el Tribunal Superior de Bogotá pretende que el mandatario convoque en 48 horas una reunión con la senadora Piedad Córdoba, La Cruz Roja Internacional y la iglesia católica, con el fin de acordar todo lo relacionado para la logística que permita la liberación de su hijo Pablo Emilio Moncayo, uno de 3.000 soldados y policías capturados durante combate por las FARC.

En el 2007 el profesor Moncayo realizó una caminata de más de mil kilómetros (620 millas) hasta Bogotá para llamar la atención pública a la situación de los detenidos por las FARC y la necesidad de entrar en un canje humanitario entre el gobierno y la guerrilla. Después de una visita a Europa a favor del canje humanitario, Moncayo caminó desde Bogotá hasta Caracas (1.400 km o 870 millas) donde se reunió con el presidente venezolano Hugo Chávez. Chávez ayudó liberar presos de las FARC el año pasado.

El presidente Uribe, en vez de tomar en serio la petición de Moncayo y otros familiares de rehenes, tomó la oportunidad para debatir con el profesor y declarar que solo las FARC tienen la culpa por los que tienen detenidos y solo deben soltar a los presos y rendir las armas y volver a la vida pacífica. Lo que no dijo fue que cuando las FARC trataron de entrar a la vida política electoral del país más de 5.000 candidatos, dirigentes y militantes de su partido, la Unión Patriótica, fueron asesinados.

Por otro lado la presidenta de la Asociación de Familiares de Policías y Militares retenidos por las FARC (ASFAMIPAZ) Marleny Orjuela, realizó una marcha del silencio el viernes 15 de mayo en horas de la noche por la céntrica carrera séptima de Bogotá en rechazo al rescate militar a sangre y fuego y para reclamar a las autoridades que destrabe el tema del acuerdo humanitario.

Orjuela dijo que seguirán trabajando porque requieren que el gobierno colombiano permita la liberación de estas personas lo antes posible. “La fuerza de la vida, de la libertad y la esperanza es la que alimenta nuestra lucha” indicó al encabezar la movilización que recorrió el centro de Bogotá en momentos en que se desarrollaba el “Septimazo” de todos los viernes en la noche donde miles de habitantes utilizan la importante vía para la creatividad, el arte, la cultura y el entretenimiento familiar.

La portavoz de ASFAMIPAZ enfatizó que siempre se opondrán al rescate por la fuerza de sus familiares y hermanos cautivos de las FARC. “Los queremos vivos y libres y no envueltos en una bandera que es como los entregan luego de morir”, explicó.

Moncayo y Orjuela anunciaron a la prensa que durante los próximos días redoblarán sus acciones y esperan contar como siempre ha sucedido con el respaldo de las organizaciones sociales.

Redactado de Prensa PCC