Sindicalistas se unen para planear luchas

PITTSBURGH - La AFL-CIO anunció algunos de los nombres de gente que harán uso de la palabra en su convención programada para los días 13 a 17 de septiembre. Muchos en el movimiento sindical lo ven como una señal de que hay el movimiento está cogiendo impulso por todo el país para reformar el sistema de salud y una histórica reforma a las leyes laborales.

Más de mil delegados y dos mil observadores escucharán al presidente Obama, el senador Arlen Specter, la secretaria del Trabajo Hilda Solís, entre otros.

Resoluciones sobre la crisis económica, reforma de salud, la estructura organizativa de la AFL-CIO, inmigración y seguridad en el empleo se debatirán.

Por primera vez en la historia de sus convenciones, la AFL-CIO se convertirá en una campaña de cabildeo, tomando tiempo para escribir cartas y llamar a los congresistas desde Pittsburgh a través de los cinco días de la convención.

El cabildeo está diseñado a poner presión a los congresistas para que promulguen la reforma del sistema de salud con una opción pública fuerte e igualmente para que pasen a la Ley de Libre Opción para Empleados, ley que quita obstáculos a los trabajadores formar y organizar sindicatos locales.

La convención será lanzada el domingo con un discurso de apertura del presidente saliente, John Sweeney. Él hablará bajo el lema "Somos muchos. Somos uno".

Las actividades del lunes se concentrarán en fomentar poder para los trabajadores haciéndolo más fácil para organizar sindicatos.

La reforma de ley laboral es solo una parte de esto, dicen fuentes envueltas en organizar la convención.

Se espera que el lunes, los sindicatos lo usen para subrayar las nuevas alianzas que están fomentando afuera de tradicional movimiento sindical, incluso con grupos como la Red Nacional Organizativa de Jornaleros y otros grupos luchando por los derechos de los inmigrantes.

La federación sindical también planea el lunes dar énfasis a las actividades de Working America, grupo afiliado a la AFL-CIO de trabajadores que no tienen un sindicato en el sitio de trabajo. Solís, el senador Bob Casey, Pablo Alvarado de los Jornaleros, y Caroline Kennedy harán uso de la palabra el lunes.

Aunque el punto culminante el martes será el discurso del presidente Barack Obama, el enfoque del día será los cambios económico a través de la reforma del sistema de salud y creando buenos empleos. El senador Specter y Dennis Van Roekel, presidente de la Asociación Nacional de Educación se dirigirán a los delegados.

Specter juega un papel clave, claro está, en la promulgación de ambos una reforma del sistema de salud con una opción pública fuerte y la lucha a favor de la Ley de Libre Opción para Empleados. Después de preocupación sobre su postura hacia ambos proyectos, él ha señalado una voluntad de acercarse más al punto de vista de los sindicatos en ambos.

El discurso de Van Roekel se ve como importante porque él es presidente de uno de los sindicatos más grande del país, un sindicato que se ha mantenido fuera de ambas federaciones laborales. Su papel se ve como crítico para crear un movimiento sindical nacional unido.

El miércoles se nominan a los oficiales de la AFL-CIO.

Si los candidatos no tienen oposición, como se espera, los nuevos oficiales serán electos por aclamación el mismo día.

El tema principal del miércoles será  la necesidad de fortalecer y continuar la alianza histórica entre los movimientos laborales y civiles. Ben Jealous, presidente de la NAACP, se dirigirá a los delegados.

Para el jueves, los participantes de los países de los G-20 se reunirán en Pittsburgh. Simultáneamente, la AFL-CIO cambiará su enfoque a las metas del movimiento laboral global.

Guy Ryder, secretario general de la Confederación Sindical Internacional, un sindicalista colombiano del frente de lucha contra el gobierno derechista que continúa a asesinar a sindicalistas, y Ken Georghetti, jefe del Congreso Laboral Canadiense, se dirigirán a los participantes.