La ultraderecha y las elecciones: republicanos, racismo, y tacticas

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Permítanme comenzar con un punto obvio: la ultraderecha está juntando fuerzas y es cada vez más extrema. Alguien dijo recientemente sin exageración que Rush Limbaugh y otros afines, los turbo-extremistas, ya no se encuentran al margen del Partido Republicano, pero que cómodamente se anidan en su esfera convencional y dan forma a sus políticas.

Tanto Ronald Reagan como George W. Bush poseían mentes moldeadas, conservadoras por seguro, pero esta nueva banda de la derecha es aun más reaccionaria y autoritaria, si se puede creer, que los dos ex-presidentes.

El ADN político de esta agrupación  no es fascista por ahora, pero dadas las condiciones actuales de crisis y la intensificación de las luchas, no se puede descartarla como una tal evolución.

En cualquier caso, su voz cada vez más fuerte en los círculos republicanos reposicionan al Partido Republican más a la derecha y ponen en extremo peligro a la democracia y al progreso.

Para los que dudan el nuevo estatus  y la influencia de estos previos advenedizos  en la elite de los círculos republicanos, bastan algunos ejemplos para comprobar mi punto.

 

  • La derrota de la senadora actual republicana Lisa Murkowski en las primarias de Alaska por un candidato del Tea Party ["Partido del Té"].
  • La movida apresurada a la extrema derecha de John McCain en su primaria senatorial.
  • La prominencia y el poder del agente corredor de Sarah Palin, Rush Limbaugh, y de Fox News.
  • La creciente fuerza y la condición privilegiada del Tea Party en el funcionamiento del GOP republicano.
  • La creciente notoriedad de Glenn Beck.
  • El sorprendente número de personas que piensan que el presidente no es ni cristiano ni ciudadano.

 

Esta marcha de estos amplificadores del odio, la mentira, el resentimiento, y el racismo sin disculpas desde los márgenes a lo convencional nos debe obligar a repensar las próximas elecciones y su importancia.

Si alguien pensaba que eran de rutina, no lo son. Si alguien creyó que podrían reducirse a otra ronda del ciclo de elecciones nada más, no lo podrán Si alguien cree que hay algo más importante en este momento, está equivocado.

A mi modo de verlo, si el Partido Republicano, inclinando ahora a una dirección más reaccionaria y autoritaria, logra ganar control en la Cámara Baja y gana momento en las elecciones del 2012, días tormentosos y tiempos difíciles  nos están por delante no sólo para la administración de Obama y los demócratas en el Congreso, sino también para el pueblo estadounidense, que ya estamos sumergidos en una prolongada y profunda crisis económica.

El terreno en que van a luchar ya no se inclinará más a nuestro favor. Estaríámos corriendo cuesta arriba. Los esperanzas de avance democrático y progresista serán mucho más tenues. Y la ventana de oportunidad que se nos abrió en el 2008 estaría casi cerrada. ¿Por cuánto tiempo?  Nadie lo sabe.

Puedo oír a alguien diciendo que si esto ocurre la culpa recae sobre el presidente y su partido. Esto es simplista, si no rotundamente equivocado.

En primer lugar, ignora que en los últimos meses se ha movido la clase dominante con decisión  y mayoritariamente al ala derecha del Partido Republicano.

Es también ciega al desproporcionado papel de los grupos derechistas más extremistas en los medios de comunicación, y su capacidad por usar al racismo, a la "la guerra contra el terrorismo", a la supremacía masculina, al nativismo, a la xenofobia, a la homofobia, a la memoria histórica selectiva, al antisocialismo, al anticomunismo, al acoso reaccionario, y a la nostalgia de un pasado idealizado, para sembrar miedo, confusión y división entre decenas de millones de personas. Mientras que hace dos años la derecha perdió el control sobre la presidencia y el Congreso, el impacto de sus ideas en el pensamiento popular simplemente no se ha esfumado.

Este cálculo político (que Obama tiene la culpa)  tampoco toma en cuenta el peso institucional y la lógica de un Estado (que incluye más que las instituciones representativas y la presidencia) que se resiste al cambio progresista

Por último, subestima la fuerza aglutinadora de Limbaugh y las pandillas en el Partido Republicano y la política nacional.

Contabilizar todo lo anteriormente mencionado complica necesariamente el proceso de cambio, y pone de alto relieve las nuevas presiones  por soluciones antidemocráticas, autoritarias y militaristas a la presente crisis.

Pero, y esto es un gran "pero," una solución tan extrema sólo sería posible si la derecha republicana (que ahora están con esteroides gracias a la incorporación de Rush, Sarah, y compañía) es capaz de recuperar el control del Congreso este otoño y la presidencia el 2012.

Dicho de otro modo, la conquista de las palancas del poder ejecutivo y del Congreso en esta y las próximas elecciones nacionales es una precondición necesaria si la nueva versión de la extrema derecha va a reestructurar despiadadamente al estado y a la economía a favor de las capas superiores de la clase capitalista.

En este contexto, adquieren las elecciones del 2 de noviembre y las elecciones presidenciales en dos años una urgencia nueva y predominante.

Resulta comprensible la frustración por parte del pueblo estadounidense con el ritmo y la profundidad del cambio. Luego de todo, es difícil ser prudente cuando no tienes trabajo o cuando no puedes comprar mandado y o pagar la atención médica o si ya vas a perder la casa en la que pasaste toda su vida adulta.

Y sin embargo, dejar que se substituya la ira y la frustración por un plan de acción bien razonado para enfrentar los desafíos presentes y futuros es como a echarse a si mismo un tiro en el pie.

Como ya sabemos en nuestras vidas personales, desahogarnos en un blanco inmediato, un amigo, un cónyugue, un familiar, un compañero de trabajo,  es solamente una solución temporal a lo que generalmente es un problema mucho más profundo, un problema que exige un enfoque más objetivo.

Sam Webb es el presidente nacional del Partido Comunista de los Estados Unidos.

swebb@cpusa.org

Foto: http://www.flickr.com/photos/robboudon/291583692/ cc 2.0