México: Reforma al Código de Justicia Militar

WASHINGTON, D.C. - El 19 de Octubre, el Presidente Felipe Calderón envió una iniciativa al Senado mexicano para reformar el código militar, un esfuerzo importante para hacerle frente a la impunidad histórica de la que ha gozado el Ejército por violaciones a los derechos humanos, pero que queda corto de lo que se esperaba de México, según la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA).

"Éste es un paso importante, especialmente porque hoy en día el Ejército está presente en muchas ciudades del país y hay quejas de violaciones a los derechos humanos a diario", dijo Maureen Meyer, encargada del programa sobre México en WOLA. "Hasta el momento, la mayoría de las violaciones a los derechos humanos por parte del Ejército no han sido castigadas porque los casos siempre son tratados en las cortes militares".

A pesar de que esta medida que limita la aplicación del fuero militar es positiva, no acaba de cumplir con lo que la Corte Interamericana de Derechos Humanos y la opinión pública exigen de México. La propuesta de reforma solamente incluye tres tipos de violaciones a los derechos humanos: tortura, violación y desaparición forzada. Esto significa que otros tipos de violaciones a los derechos humanos como la detención arbitraria, que por lo general lleva a otro tipo de violaciones a los derechos humanos, y la privación arbitraria de la vida, como son los ya varios casos de civiles que no pararon en un retén militar y fueron asesinados a manos de soldados, quedarán excluidos y seguirán siendo juzgadas dentro de las cortes militares. Las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en contra de México que ordenaron la reforma al artículo 57 del código militar no hacen ninguna mención sobre la posibilidad de escoger qué violaciones a los derechos humanos sean excluidas de la jurisdicción militar; los estándares interamericanos de derechos humanos exigen que todas las violaciones a los derechos humanos sean investigadas por la jurisdicción civil. Una reforma realmente progresista haría que todas las violaciones a los derechos humanos contra civiles fueran tratadas en cortes civiles y fuera del sistema militar.

"Las víctimas de violaciones a sus derechos humanos por militares merecen una reforma integral al código militar para que sus casos sean juzgados por cortes civiles", dice Meyer. "Esperamos que el Congreso de México tome en cuenta estas consideraciones en su debate sobre la propuesta del Presidente Calderón".

Este debate no podría ser más importante. Como evidencia la publicación de WOLA y el Centro Prodh "Abusos y miedo en Ciudad Juárez", el despliegue de militares en operativos antidrogas ha resultado en un aumento alarmante de violaciones a los derechos humanos por los militares en contra de civiles. Ha habido por los menos 4,000 quejas por abusos de militares ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos desde el inicio del gobierno del Presidente Calderón en diciembre de 2006.

"La falta de castigo a estas violaciones ha fomentado nuevos abusos y debilita la confianza de los ciudadanos en las fuerzas armadas", afirma Meyer.

WOLA