¿De veras que somos libres?

ItsAboutFreedom520x308

Recibimos estos pensamientos de un graduado reciente de high school en Michigan. Reflejan la conciencia de una creciente desigualdad entre muchos jóvenes en las comunidades norteamericanas que han sufrido tantos golpes en los últimos años. Creímos que a Uds., nuestros lectores, les iba interesar.

Soy un lavaplatos y tengo 17 años. En estos momentos vivo en un suburbio de clase trabajadora en Detroit.

En mi casa hay cuatro adultos (de los cuales solamente dos tienen trabajo), tres menores, tres recámaras (dormitorios), un baño, y dos vehículos. Claro, las cosas podrían ser peores, pero estamos bien apretaditos así como estamos.

Superficialmente, vivimos en una de las sociedades más libres que nunca ha existido. Cuando se les pregunta si son libres, la gente suele contestar con un "sí" resonante. Cuando yo estaba en la primaria, me inculcaban en la cabeza pensar de la bandera norteamericana y la libertad como sinónimas. Pero esa es una mentira, porque es superficial, así como, superficialmente, el racismo ya es casi inexistente, que es otra mentira.

Son muchos los que van a reclamar que vivimos en una sociedad democrática, con mercados libres, y por eso somos libres políticamente, económicamente y socialmente. De hecho, argumentan muchos que no puedes tener un sistema verdaderamente democrático sin el capitalismo, y que esos dos son de alguna manera compatibles. Dicen que lo único que nos defiende de la tiranía es el mercado libre, porque proporciona a cada ciudadano la oportunidad (pero no el derecho, claro) de "ser lo que quiera, a hacer su propio destino". Y es verdad, para los que nacen a una posición de privilegio, o que son individuos con una ambición extraordinaria, pero no todos gozan de estas ventajas.

La única opción especial que el capitalismo me ofrece a mí que de otra manera no hubiera tenido es la libertad de escoger entre Coca-Cola y Pepsi, o entre McDonalds y Burger King. Ambos son completamente superficiales y meras distracciones que no tienen la más minima relación con las demás decisiones que tienen que hacer la gente trabajadora, como la decisión o de pagar el abono de la casa o mandarles a sus hijos a la universidad, a ir al doctor o llenar el tanque de gasolina. Las opciones que nos ofrece nuestro sistema actual depende de la libertad de escoger, y los pobres que viven cargados de deuda no están en posición ninguna para aprovechar de ninguna opción tal llamada.

Y esta no es la libertad; es la esclavitud. Mucha genta que defienda este sistema dice que es simplemente un hecho de esta vida y ya. O, responden con el clásico "Yo logré hacerme una buena vida, y ¿por qué tú no puedes hacer igual?" Dentro de mi familia lo oigo en cada discusión política. Gracias a Dios no lo oigo en la casa, pero de otros familiares que tenían recursos que mi mamá no tuvo. Una familiar que vivía con su mamá durante su juventud y recibió asistencia del gobierno para alimentar a sus hijos ya dice que cualquier que lucha debe estar trabajando tres trabajos. Otro estaba en la Marina durante las décadas de los 70 y 80 y fue dado casa y educación gratis, y dice la misma cosa. Ahora es gerente en una planta de producción y saca alrededor de $200.000 por año, y su mayor obstáculo es esa maldita unión que sigue exigiendo un pago justo y beneficios.

Pero, ¿cuáles son las otras libertades que se nos niegan bajo nuestro sistema actual?

Cada día cuando llegamos al trabajo, entramos a una dictadura. Pero, ¿qué otra opción nos queda? Trabajamos por un grupo de hombres que nos pagan lo mínimo posible y que se quedan con lo demás para si mismos. Ellos son los que mandan, son los que ganan, pero no son los que crean en verdad los valores y las riquezas. ¿Y dime dónde está la "libertad?" Yo no voté por los tiranos en mi lugar de trabajo. Y si me atrevo a quejarme, pierdo mi trabajo.

Sin embargo, siempre tenemos el derecho de votar por nuestros líderes. Pero los únicos que son opciones reales son los dos partidos que apoyan al sistema capitalista, y ambos candidatos para la alcaldía están comprados por la clase dominante, porque sin la ayuda de esta perderían las elecciones. Se cuida antes de nada a la clase capitalista, y lo que queda va a las masas, nada más para dejaros contentos.

La diferencia principal entre los partidos Demócrata y Republicano es que el uno está dispuesto a dejarles a las masas comer más migajas de la mesa. El Partido Repubicano ni siquiera hace un secreto de su deseo de entregar los frutos de nuestro labor a los más adinerados entre nosotros. Parecen estar bajo la impression que los Norteamericanos no queremos sacrificio compartido, pero más bien una "prosperidad compartida". Los Demócratas siquiera tartan de hacer cosas que benifician a la clase trabajadora mientras cuiden a sus compinches corporativas. Sara Palin y Barack Obama no deben ser vistos en la misma luz, pero no es ningún secreto que para que gane cualquier de ellos un ofició mayor, ambos deben vender un poco de sus almas a las corporaciones. Creo que el corazón del presidente Obama está en el lugar correcto, pero aun así tiene que hacer concesiones al "gobierno sombra" si quiere seguir en su posición de presidente, porque si no coopera, van a encontrar a alguien que sí lo haría y con gusto.

Los 400 más ricos de los 310.000.000 norteamericanos poseen más riquezas que los 155.000.000 de abajo en total, y sigue empeorándose

Claro, las cosas podrían ser peores, pero vivimos en el país más rico del mundo, y no hay excusa ninguna en absoluto por la existencia de esta situación. Bastan y sobran recursos para todos, y tenemos a mano la tecnología necesaria para asegurarles a todos lo que creo que son los derechos humanos más básicos y más. Ya no estamos viviendo en el siglo XIII La humanidad ha avanzado suficientemente como para acabar con el hambre y tener de sobra, y más probablemente podemos hacerlo sin destruir la tierra que nos sostiene.

Ahora, dime una vez más, ¿somos libres?

Foto: Blake Deppe/People's World